Una nueva semana, para el desarrollo de tecnología, te presentamos el registro de marcas relacionadas con patentes, el desarrollo de las IA y la creación de tecnologías que podrían cambiar nuestro cotidiano. Algunas de estas notas son muy interesantes y otras de seguro revolucionaran tu mente, aquí te presentamos una mirada distinta de nuestra sociedad desde el registro patentes y de marcas. Te recordamos revisar nuestras notas de la semana anterior.
Se trata de dos patentes registradas en Reino Unido en relación al diseño de un robot que puede recorrer y limpiar escaleras y otro diseño de unos brazos robóticos ideados para abrir cajones y agarrar objetos como tazas simultáneamente.
Al parecer, el fabricante habría estado trabajando en el desarrollo de un robot autónomo de limpieza capaz de interactuar con muebles y objetos de la casa. Como siempre ocurre con las patentes, el hecho de registrarlas no implica que vayan a acabar materializándose en un producto de consumo y un portavoz de Dyson comenta a Bloomberg que:
Aunque registramos muchas patentes, nunca se habla acerca de tecnologías que quizás se lancen o quizás no, pero sin duda son ideas que resultarían muy útiles y que supondrían un llamativo aliciente.
Al fin y al cabo, llevamos años viendo robots subir escaleras, trepar paredes o haciendo parkour, algunos más en plan experimental y otros ya trabajando en entornos en los que la limpieza va más allá de quitar pelusas, como en el caso de las centrales nucleares.
Hace algunos meses vimos también una propuesta de robot recolector de manzanas cuyo punto destacado era precisamente el brazo robot especializado, por lo que los robots de Dyson contarían con precedentes que han demostrado hacer bien esas funciones.
Queda ver si la propuesta del fabricante en sus patentes acaba siendo una realidad, al igual que todos estos precedentes con autonomía y habilidades que, como solemos buscar en los robots, puedan acabar siendo de mucha ayuda en en algunas tareas.
En enero de 2020 las oficinas de patentes de la Unión Europea y Reino Unido dictaminaron que dos invenciones: la primera una botella capaz de cambiar de forma y la segunda una lámpara que se encendía de forma intermitente imitando la actividad de un cerebro, no podían registrarse como invenciones.
La razón es que el autor detrás de esas dos invenciones, una entidad llamada Dabus, no era ni un ser humano ni un colectivo de personas. Es un sistema de inteligencia artificial.
El debate llevo a que el director de la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM), José Antonio Gil Celedonio, se pronunciase al respecto en una entrevista . Celedonio consideró entonces que no era necesario acelerar de más en este debate y menciono:
"Como poderes públicos debemos ofrecer certezas a sectores que son muy innovadores, sin olvidarnos de que no todo puede ni debe ser patentable. Lo que se necesita en un sistema de patentes es que haya mucha seguridad jurídica. Las patentes son una pieza esencial para el desarrollo tecnológico y el crecimiento de la investigación científica de un país."
Ahora Dabus ha sufrido otro revés. Si primero se pronunciaron las oficinas de patentes de la Unión Europea y de Reino Unido, luego llegó el turno de su homóloga en Estados Unidos. Y su resolución fue tajante y contundente. Solo las "personas naturales" pueden ser inventoras.
Imagination Engines es la empresa responsable de la IA llamada Dabus. Se trata de una firma nacida en Missouri - EEUU que preparó todo el papeleo para presentar como candidata a inventora al sistema de inteligencia artificial que idearon. Al recibir la negativa de la Oficina de Patentes y Marcas estadounidense, Thaler demandó a Andrei Iancu, el entonces director de la oficina.
En su recurso, Thaler y su equipo de Imagination Engines recordaron que no había precedentes que determinasen que solo un ser humano podía ser inventor. Mencionan que:
"De hecho, cualquier discusión sobre que los inventores solo pueden ser personas naturales se basa en asumir que solo una persona puede inventar".
La jueza Leonie Brinkema no compro el argumento a Imagination Engines y en su sentencia respalda a la Oficina de Patentes y Marcas de EEUU y a su actual director, Drew Hirshfeld. De hecho, en su escrito, Brinkema apostilla que al presentar una solicitud de patente se debe firmar y jurar que el individuo en cuestión es quien dice ser.
"Un robot o un sistema de inteligencia artificial todavía no tiene esa capacidad de jurar."
Uno de los abogados de Imagination Engines, Ryan Abbott, ha avanzado en The Register que esperan recurrir el caso y seguir batallando legalmente. Pero de momento solo han encontrado puertas cerradas en su periplo judicial.
Electronic Arts habría creado un nuevo estudio centrado en juegos de mundo abierto, que recibiría el nombre de Neon Black Studios. Esta información proviene tanto de la Oficina de Patentes y Marcas de los Estados Unidos como de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea, en la que se habría registrado una nueva marca presentada por el editor de Battlefield.
Al parecer, este nuevo estudio está relacionado con Kevin Stephens, el ex vicepresidente y jefe del estudio Monolith Productions, estudio que se encargó de desarrollar La Tierra Media: Sombras de Mordor, entre otros.
Además, EA aseguró que el estudio estaba trabajando en un juego de acción y aventura de mundo abierto, algo en lo que Stephens tiene experiencia de sobra. La gente de VGC asegura que ha pedido a Electronic Arts más información de Neon Black Studios, pero por ahora solo podemos atenernos a las declaraciones que la gerente del grupo de EA, Samantha Ryan, ofreció a GI.biz a principios de este verano.
Por tanto, Electronic Arts habría creado un nuevo estudio centrado en juegos de mundo abierto parece más que obvio basándonos en patentes, aunque por el momento falta la confirmación oficial por su parte.