El pasado 6 de agosto de 2024, las autoridades aduaneras en Guayaquil decomisaron un cargamento de zapatos y medias falsificadas valorado en ocho millones de dólares, lo que representa uno de los operativos más grandes en la lucha contra la piratería en Ecuador. Este decomiso es un claro recordatorio de la importancia de proteger los derechos de propiedad intelectual, en especial para marcas de renombre mundial como lo son Nike, Adidas y Puma. La protección de estos derechos no solo resguarda la integridad y el valor de las marcas, sino que también garantiza la seguridad del consumidor y fomenta un entorno de competencia leal en el mercado.
La acción de decomiso fue llevada a cabo en el Terminal de Carga Marítimo TPG-INARPI, donde agentes del Cuerpo de Vigilancia Aduanero (CVA) identificaron un contenedor que pretendía ingresar al país productos con marcas registradas sin la autorización de los titulares de los derechos. Este tipo de operaciones no solo protege a las marcas afectadas, sino que también envía un mensaje contundente a aquellos que buscan beneficiarse del comercio ilícito de productos falsificados. La intervención de los titulares de las marcas en estos procesos es fundamental para asegurar que se tomen las medidas legales adecuadas y se protejan sus derechos.
En este contexto, la propiedad intelectual juega un papel crucial, ya que el registro de una marca en Ecuador otorga a su titular el derecho exclusivo de utilizarla en el comercio. Este derecho incluye la facultad de impedir que terceros utilicen signos idénticos o similares sin autorización, lo cual es esencial para mantener la reputación y el valor de la marca en el mercado. La intervención en procesos como el decomiso de este cargamento en Guayaquil es una manifestación concreta de la importancia de estos derechos y de la necesidad de hacerlos valer de manera efectiva.
Las marcas Nike, Adidas y Puma son reconocidas globalmente y cuentan con derechos de propiedad industrial debidamente registrados en Ecuador. Estos registros no solo protegen el uso exclusivo de sus signos distintivos, también la integridad de los productos que representan, tales como calzado y prendas de vestir, que son clasificados bajo la Clase Internacional 25. La protección de estos derechos es vital para asegurar que los productos que llegan a manos del consumidor cumplan con los estándares de calidad y autenticidad que estas marcas garantizan.
En Ecuador, el registro de una marca confiere a su titular la facultad de uso exclusivo y excluyente del signo distintivo, como lo establece el Código Orgánico de la Economía Social de los Conocimientos (INGENIOS). Esta exclusividad es fundamental para que las marcas puedan mantener su reputación y evitar que productos falsificados o de baja calidad dañen su imagen.
La intervención de los titulares de marcas en estos procesos legales es esencial para asegurar que las medidas de protección sean efectivas. No se trata solo de decomisar los productos falsificados, sino de garantizar que estos no lleguen al mercado y que los responsables enfrenten las consecuencias legales correspondientes. Este caso en Guayaquil es un ejemplo claro de cómo la protección de la propiedad intelectual no solo beneficia a las marcas, sino que también protege a los consumidores y asegura un comercio justo y legal.
El decomiso de este cargamento no es solo un acto de protección comercial, sino una acción legal fundamentada en la normativa ecuatoriana que combate el comercio ilícito y protege los derechos de propiedad intelectual. En particular, la Ley Orgánica que reformó varios cuerpos legales en 2021 estableció en el Código Orgánico Integral Penal (COIP) el delito de "actos lesivos a la propiedad intelectual". Esta normativa, contenida en el artículo 208A, sanciona con penas de prisión, comiso de productos y multas a quienes, a sabiendas y con fines de lucro, infrinjan los derechos de propiedad intelectual en el comercio.
El artículo 208C del COIP, además, regula el destino final de los bienes infractores, permitiendo su destrucción o adjudicación gratuita, dependiendo de la resolución judicial. Esta disposición asegura que los productos falsificados no vuelvan al mercado, protegiendo tanto a las marcas como a los consumidores. La destrucción de productos falsificados es una medida disuasoria efectiva, ya que envía un mensaje claro de que las violaciones a los derechos de propiedad intelectual no serán toleradas.
La aplicación de estas normativas en el caso del decomiso en Guayaquil subraya la importancia de una acción coordinada entre las autoridades aduaneras, los titulares de derechos de propiedad intelectual y el sistema judicial. La colaboración de las marcas afectadas es crucial para que los casos de infracción sean perseguidos con rigor y para que se adopten todas las medidas necesarias para proteger la propiedad intelectual. Este caso es un ejemplo contundente de cómo la ley ecuatoriana puede y debe ser utilizada para salvaguardar los derechos de propiedad intelectual y mantener la integridad del mercado.
El decomiso de productos falsificados en Guayaquil no solo es un triunfo para las marcas afectadas, sino también un paso significativo para Ecuador en su lucha contra la piratería y la protección del comercio legítimo. Este tipo de acciones son esenciales para mejorar la imagen del país como un lugar seguro para la inversión y el comercio. Ecuador, al ser un punto estratégico en el comercio internacional, enfrenta el desafío constante de proteger su mercado de productos ilegales que afectan tanto a la economía local como a la confianza de los consumidores.
En este contexto, la participación de Luzuriaga & Castro Abogados como representantes legales de las marcas fue crucial para garantizar la protección efectiva de sus derechos de propiedad intelectual. Nuestra firma trabaja junto a las autoridades aduaneras para asegurar que los procesos de decomiso se lleven a cabo de acuerdo con la legislación vigente, y que los intereses de nuestros clientes estén plenamente resguardados. Esta intervención no solo protege a las marcas de un daño económico considerable, sino que también refuerza su posición en el mercado ecuatoriano, asegurando que sus productos se mantengan como referentes de calidad y autenticidad en el país.
Comparativamente, los niveles de productos en el mercado ecuatoriano varían significativamente, y la presencia de falsificaciones puede distorsionar la percepción de los consumidores sobre lo que constituye un producto de calidad. Las falsificaciones, generalmente fabricadas con materiales de inferior calidad y sin cumplir con los estándares de seguridad, no solo perjudican a las marcas legítimas, sino que también ponen en riesgo la salud y la seguridad de los consumidores. Nuestra labor no se limita a la defensa legal, sino que también incluye la asesoría estratégica para nuestros clientes en la protección de sus marcas en mercados donde la falsificación es una amenaza constante. Al intervenir en estos casos, ayudamos a mantener la integridad del mercado y aseguramos que solo productos de calidad, estén disponibles para los consumidores ecuatorianos.
Ecuavisa. (2024, agosto 12). Decomisan cargamento de zapatos falsificados en Guayaquil valorado en USD 8 millones.
Expreso. (2024). Aduana de Ecuador refuerza control en puertos: Decomiso millonario de calzado falsificado.
Metro Ecuador. (2024, agosto 12). Decomisan zapatos chinos valorados en USD 8 millones en el puerto de Guayaquil.
Primicias. (2024). Cuerpo de Vigilancia Aduanero realiza operativo en Bahía de Guayaquil: Zapatos falsificados incautados.