Las empresas multinacionales enfrentan hoy una presión sin precedentes para proteger sus activos intangibles en un entorno de constante cambio normativo. En este escenario, la protección de las marcas —y su enforcement efectivo— se convierte en una prioridad estratégica. Instrumentos regulatorios como la Directiva de Denunciantes en Europa, la Ley de Prevención de Extorsión Extranjera en Estados Unidos, y reformas en Asia y América Latina, imponen nuevas obligaciones y abren espacios para combatir infracciones de propiedad intelectual. La vigilancia de la PI ya no es solo un asunto corporativo: es un imperativo de cumplimiento legal y reputacional en la economía global actual.
El enforcement de marcas en este contexto enfrenta retos complejos: la fragmentación normativa entre regiones, la necesidad de actuar con agilidad ante riesgos emergentes, y el uso creciente de tecnología como blockchain o inteligencia artificial para combatir infracciones. Al mismo tiempo, la colaboración entre entidades públicas y privadas se fortalece, exigiendo a las empresas respuestas más rápidas y programas de compliance adaptados a realidades locales y globales.
Este artículo examina cómo las transformaciones regulatorias en distintas regiones del mundo afectan la protección de marcas y otros derechos de propiedad intelectual. Asimismo, analiza las estrategias que las empresas deben adoptar para defender sus activos en un entorno de riesgos múltiples e interconectados.
La Directiva (UE) 2019/1937 relativa a la protección de denunciantes ha modificado radicalmente la gestión de riesgos de propiedad intelectual en Europa. Ahora, los empleados pueden reportar anónimamente la falsificación de marcas, uso no autorizado de licencias o vulneraciones a secretos industriales, bajo la protección de canales seguros y sin temor a represalias (Directiva UE 2019/1937).
Esta medida impacta directamente en los programas de compliance de PI: las empresas deben integrar mecanismos de detección temprana de infracciones en sus operaciones diarias. Ignorar o minimizar las denuncias podría derivar en sanciones regulatorias severas y, peor aún, en daños a la reputación comercial de las marcas.
Sin embargo, la implementación de la directiva presenta asimetrías en la región. Mientras países como Francia y Alemania han avanzado en su aplicación, otros como Polonia o Hungría presentan retrasos, complicando la gestión uniforme del enforcement de marcas en operaciones multinacionales.
En este escenario, las empresas deben reforzar la capacitación interna en temas de PI, sensibilizar a sus colaboradores sobre los riesgos asociados a las infracciones de marca y establecer protocolos claros de investigación interna para responder eficazmente a las denuncias. En Luzuriaga & Castro, trabajamos en la protección estratégica de activos intangibles, integrando programas de compliance adaptados a las exigencias de cada jurisdicción.
Asia, epicentro de innovación y comercio global, ha tomado medidas significativas para fortalecer la protección de marcas. China, bajo su Ley de Propiedad Intelectual 2021, aumentó las multas por falsificación e introdujo procedimientos acelerados para resolver disputas de marca, elevando los niveles de confianza en su sistema judicial (Ley de PI de China).
En 2023, China registró 7.8 millones de solicitudes de patentes, incluyendo registros de marcas, lo que refleja la creciente importancia estratégica de la PI en su modelo económico (Informe OMPI 2023). Este crecimiento ha incentivado también una mayor vigilancia en el mercado para detectar productos falsificados.
Japón, por su parte, ha impulsado iniciativas pioneras como el uso de blockchain para rastrear la autenticidad de productos, fortaleciendo la trazabilidad y reduciendo las posibilidades de fraude en sectores clave como la tecnología y el farmacéutico (JPO Annual Report 2023).
El sudeste asiático, si bien avanza en regulación, enfrenta retos derivados de escándalos de corrupción, como el caso de malversación en Vietnam por USD 12.4 mil millones, que afectó licencias de marcas extranjeras (Financial Times). Estos eventos refuerzan la necesidad de contar con una defensa sólida. Nuestro equipo ofrece asesoría y representación legalfrente a falsificaciones y uso no autorizado de marcas.
En diciembre de 2023, Estados Unidos promulgó la Foreign Extortion Prevention Act (FEPA), que criminaliza el soborno a funcionarios extranjeros, incluyendo prácticas para facilitar el uso ilegítimo de marcas, obtener licencias o evadir procesos de enforcement (FEPA 2023).
La FEPA complementa la FCPA y plantea una amenaza directa para empresas cuyos activos más valiosos son marcas y patentes. Ahora, no solo las infracciones de propiedad intelectual son riesgos legales: la corrupción que las encubre también lo es.
Un ejemplo práctico: en 2023, una empresa biotecnológica que descubrió sobornos en México relacionados con licencias de patentes se benefició de una reducción de sanciones tras autodenunciarse al Departamento de Justicia en cuestión de horas (DOJ Corporate Enforcement Policy).
En Luzuriaga & Castro, incorporamos estas nuevas exigencias en los programas de cumplimiento normativo, con protocolos específicos para prevenir riesgos de infracción, corrupción y fuga de activos de PI en procesos corporativos.
En Oriente Medio, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita han reforzado sus leyes anticorrupción para proteger sectores intensivos en propiedad intelectual, como la tecnología y el entretenimiento. Esto responde a su estrategia de diversificación económica y a su interés en atraer inversión extranjera.
Brasil ha dado un paso adelante mediante el uso de inteligencia artificial para detectar irregularidades en contratos públicos vinculados a transferencias de tecnología y licencias de marca (Doing Business 2023).
En el Reino Unido, la nueva Economic Crime and Corporate Transparency Act 2023 amplía la responsabilidad penal corporativa para incluir delitos relacionados con la manipulación de activos de PI (UK Economic Crime Act). Esto obliga a fortalecer los procesos de due diligence sobre licencias, transferencias y adquisiciones de marcas.
Estas tendencias muestran un claro mensaje: el enforcement de marcas y activos intangibles se encuentra ahora firmemente entrelazado con las políticas de anticorrupción y transparencia global.
La transformación regulatoria en curso redefine el rol de la propiedad intelectual en las estrategias de cumplimiento empresarial. La protección de marcas ya no es un tema exclusivo de litigios comerciales: es un componente central en la defensa contra riesgos regulatorios, de corrupción y reputacionales.
Las empresas que integren la gestión activa de marcas en sus programas de cumplimiento —con auditorías internas periódicas, canales de denuncia efectivos, monitoreo tecnológico avanzado y colaboración transfronteriza— estarán mejor posicionadas para afrontar los desafíos del nuevo entorno global.
En un mundo cada vez más regulado y transparente, la fortaleza de una marca ya no solo se mide por su valor comercial, sino también por su capacidad de resistir a riesgos legales y éticos. En esta nueva era, proteger las marcas es proteger la credibilidad, la competitividad y el futuro mismo de las organizaciones.
Unión Europea (2019). Directiva (UE) 2019/1937 del Parlamento Europeo y del Consejo relativa a la protección de las personas que informen sobre infracciones del Derecho de la Unión.
Departamento de Justicia de EE.UU. (2023). Corporate Enforcement Policy (actualizada en 2023).
Congreso de Estados Unidos (2023). Foreign Extortion Prevention Act (FEPA).
Gobierno de China (2021). Ley de Propiedad Intelectual de la República Popular China (enmiendas).
Reino Unido (2023). Economic Crime and Corporate Transparency Act 2023.
OMPI (2023). World Intellectual Property Report: Innovation in a Time of Crisis.
Oficina de Patentes de Japón (2023). Annual Report on Intellectual Property Activities.
Banco Mundial (2023). Doing Business 2023: Enforcing Intellectual Property Rights.
Transparency International (2023). Corruption Perceptions Index 2023.
Bloomberg Law (2023). Yonekura, S. & Sullivan, M. Rising Global Enforcement Pressure Puts Multinationals on Notice.
Hogan Lovells (2023). Global Anti-Corruption Review.
Risk Global Consulting (2023). Actualizaciones en Cumplimiento Normativo.
Cada 26 de abril celebramos el Día Mundial de la Propiedad Intelectual, una fecha instaurada por la OMPI para reconocer el valor de la creatividad, la innovación y los derechos que las respaldan. Este 2025, la celebración se mueve al ritmo de la música, destacando cómo los derechos de propiedad intelectual (PI) no solo protegen la labor de compositores, intérpretes y productores, sino que también fortalecen toda una economía creativa interconectada.
La música, como lenguaje universal, trasciende fronteras y sectores. Su vínculo con la PI es esencial para garantizar la sostenibilidad del ecosistema creativo. En este contexto, desde Luzuriaga & Castro Abogados reafirmamos nuestro compromiso no solo en la defensa jurídica de estos derechos, sino también en la formación de quienes deben hacerlos cumplir. Por eso, nos unimos a esta celebración resaltando nuestras acciones en capacitación y divulgación como parte fundamental del fortalecimiento institucional.
La música es una de las expresiones más evidentes del potencial creativo humano. Detrás de cada melodía existen derechos que resguardan el trabajo, la inversión y la identidad cultural de sus creadores. Desde los derechos de autor sobre letras y composiciones hasta los derechos conexos de los intérpretes y productores, la PI articula un complejo entramado legal que garantiza que los beneficios económicos y morales lleguen a quienes dan vida a la música.
Sin embargo, este entramado enfrenta desafíos contemporáneos: el streaming, la inteligencia artificial generativa, la viralización en plataformas como TikTok, la piratería digital y los usos no autorizados en contenido generado por usuarios. Cada uno de estos fenómenos pone a prueba la eficacia del marco legal y la capacidad de respuesta de autoridades y titulares de derechos. Celebrar el Día Mundial de la PI desde la música es también una oportunidad para visibilizar estos desafíos y repensar las respuestas que requiere un mercado en constante evolución.
En Luzuriaga & Castro hemos comprendido que la defensa efectiva de la propiedad intelectual no se limita a los tribunales. Requiere instituciones fuertes, operadores jurídicos bien formados y un ecosistema que valore la innovación y la creatividad como motores del desarrollo. Por eso, desde hace varios años hemos desarrollado un programa de capacitaciones dirigido a autoridades aduaneras, policías y funcionarios públicos encargados de controlar, vigilar y sancionar delitos contra la PI.
Estas jornadas han abordado temáticas clave como:
Tal como lo destacamos en nuestro artículo “La importancia de la capacitación en propiedad intelectual para autoridades aduaneras”, el conocimiento especializado permite una reacción oportuna y coherente frente a los delitos contra la PI. Nuestra experiencia también evidencia que la formación genera confianza, articulación institucional y mejora la calidad de las decisiones administrativas.
Más allá del enfoque legal, este Día Mundial de la PI también nos invita a reflexionar sobre cómo la propiedad intelectual conecta a las personas. La música, en particular, tiene la capacidad de evocar emociones, contar historias y generar identidad colectiva. Pero ninguna canción existiría sin protección adecuada para su autor o sin condiciones legales que permitan su circulación justa en el mercado.
Desde el diseño de políticas públicas hasta el desarrollo de tecnologías para identificar infracciones, la PI construye puentes entre la creatividad y la innovación. En este sentido, iniciativas como el programa IP Youth Ambassadors de la OMPI o los estudios sobre música y propiedad intelectual en América Latina abren caminos para una cultura legal que protege y promueve el arte.
Este 26 de abril, el Día Mundial de la Propiedad Intelectual nos recuerda que la música no solo se escucha: también se defiende. En Luzuriaga & Castro, celebramos esta fecha ratificando nuestro compromiso con la protección de los derechos que hacen posible la creación artística. Lo hacemos en los juzgados, en las fronteras y, sobre todo, en las aulas.
Porque cuando una autoridad reconoce una infracción, cuando un joven artista registra su primera canción o cuando una marca protege la música que inspira su identidad, la propiedad intelectual cumple su promesa de ser motor de desarrollo, justicia y cultura.
Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI). (2025). Día Mundial de la Propiedad Intelectual 2025: Siente el ritmo de la PI.
Luzuriaga & Castro Abogados. (2023). La importancia de la capacitación en propiedad intelectual para autoridades aduaneras.
Luzuriaga & Castro Abogados. (2023). Defensa de la propiedad intelectual y la capacitación de autoridades: un desafío en evolución.
Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI). (2023). Global Trade in Fakes: A Worrying Threat. OCDE-EUIPO Report.
OMPI. (s.f.). Academia de la OMPI: Jóvenes embajadores de la PI.
El combate contra las falsificaciones ya no es únicamente una preocupación de las marcas. Hoy, representa una prioridad global que articula múltiples niveles, desde las aduanas hasta las plataformas digitales, con un objetivo claro: proteger al consumidor, salvaguardar la economía legítima y garantizar la vigencia de los derechos de propiedad intelectual. En un escenario donde el 3.3% del comercio global está compuesto por productos falsificados (OCDE, 2023), la necesidad de acciones coordinadas y estrategias integrales se vuelve urgente.
Este fenómeno afecta transversalmente: productos sin control de calidad llegan a manos de consumidores vulnerables, se erosionan las fuentes de empleo legítimo y se generan pérdidas multimillonarias para las empresas que innovan y cumplen la ley. En Europa, por ejemplo, la EUIPO estima que las falsificaciones generan pérdidas anuales de €83 mil millones, debilitando tanto a grandes corporaciones como a emprendimientos emergentes.
El impacto tangible se evidencia en cifras contundentes. Solo en 2023, las aduanas de la Unión Europea incautaron 86 millones de productos falsificados, de los cuales el 23% representaba un riesgo directo para la salud. Desde juguetes con componentes tóxicos hasta electrónicos inseguros, las falsificaciones desafían los sistemas de control tradicionales, demandando respuestas más inteligentes y articuladas.
Este artículo explora los mecanismos especializados de enforcement, estrategias sectoriales, cooperación público-privada y desafíos emergentes, evidenciando cómo la lucha contra las falsificaciones se ha convertido en un ecosistema multidimensional que protege no solo activos comerciales, sino derechos fundamentales del consumidor.
Los mecanismos actuales combinan inteligencia artificial, marcos legales específicos y procedimientos simplificados para actuar con rapidez frente al tráfico de productos falsificados. Herramientas tecnológicas como el Intellectual Property Module (IPM) de la OMA han transformado la capacidad de respuesta de las aduanas. Con una base de más de 5 millones de registros de PI, este sistema se encuentra integrado en 78 administraciones y permite identificar con una precisión del 92% productos sospechosos.
Un caso paradigmático es la Operación Fake Star (2022), donde algoritmos de reconocimiento de patrones detectaron 12.000 paquetes con relojes Rolex falsificados en Heathrow. Asimismo, la implementación del sistema FAST en Singapur ha reducido el tiempo promedio de inspección de 45 a solo 7 minutos por envío sospechoso.
El respaldo legal resulta igualmente decisivo. El Reglamento (UE) 608/2013 permite a las aduanas actuar de oficio, reteniendo mercancías sospechosas y autorizando su destrucción en un plazo de 96 horas. En 2023, este mecanismo se aplicó en 23.000 casos. Por otro lado, la STOP Act de EE. UU. exige el envío previo de datos electrónicos para los paquetes postales, lo que logró una reducción del 38% en las falsificaciones detectadas por esta vía.
Estos sistemas funcionan como el primer filtro para frenar la circulación de productos falsificados. La combinación entre tecnología y normativa especializada permite actuar antes de que estos artículos lleguen a las manos del consumidor, reduciendo riesgos sanitarios, económicos y legales.
Una de las claves en la lucha contra falsificaciones es adoptar enfoques diferenciados por categoría de producto, adaptando los recursos y tecnologías según los riesgos y características de cada sector. En la industria farmacéutica, por ejemplo, el sistema EMVO permite la serialización y verificación de medicamentos en el 98% del mercado europeo, bloqueando más de 550.000 unidades falsas en 2023.
El sector lujo ha optado por soluciones basadas en blockchain. El programa AURA, impulsado por LVMH, permite autenticar productos desde su origen hasta el punto de venta. En 2023, esta tecnología facilitó 17.000 incautaciones coordinadas con aduanas, demostrando su eficacia como herramienta preventiva.
En la electrónica, el Proyecto CHIP desarrollado por la EUIPO ha implementado análisis de componentes mediante espectrometría portátil, logrando reducir en un 32% las falsificaciones de semiconductores entre 2022 y 2023. Estas estrategias permiten actuar en tiempo real, adaptando los métodos de verificación a las particularidades de cada sector.
La cadena de valor del enforcement se estructura en tres fases: prevención, interceptación y seguimiento. La prevención incluye la formación de 45.000 oficiales aduaneros por parte de la Academia RILO de la OMA. La interceptación se refuerza con escáneres de última generación como el sistema ECO, y el seguimiento se apoya en análisis forenses y cooperación con organismos como Europol para desmantelar redes.
Cada eslabón de esta cadena suma valor, construyendo un sistema reactivo y proactivo, capaz de anticiparse a las nuevas formas que adoptan los delitos contra la propiedad intelectual.
La colaboración entre el sector público y privado ha demostrado ser uno de los motores más eficaces del enforcement moderno. Modelos como los Centros de Inteligencia Conjunta, incluyendo el IP Crime Center de INTERPOL o el Anti-Counterfeiting Group en Reino Unido, permiten procesar más de 15.000 reportes anuales provenientes de empresas, activando operaciones coordinadas a nivel internacional.
Otro ejemplo exitoso es el programa de Operadores Económicos Autorizados (AEO) en la UE. Estas empresas certificadas, actualmente más de 3.200, se benefician de inspecciones reducidas (<2%), facilitando el comercio legal y fortaleciendo la trazabilidad de productos legítimos.
Las tecnologías colaborativas también cumplen un rol central. La plataforma ACIS, utilizada en 42 países, permite el intercambio de inteligencia sobre rutas y métodos de operación de las redes de falsificación. Por su parte, IPM Connect, desarrollada por la EUIPO, permite a las empresas registrar sus derechos directamente con las aduanas, con más de 58.000 derechos registrados en 2023.
Estas herramientas demuestran que ningún actor puede combatir las falsificaciones de forma aislada. La coordinación entre empresas, gobiernos y organismos multilaterales permite cerrar el círculo de protección en todos los niveles de la cadena comercial, protegiendo tanto a consumidores como a operadores legítimos.
El escenario actual presenta desafíos complejos. Uno de los más relevantes es la fragmentación de envíos: el 82% de las falsificaciones incautadas llegan en paquetes menores a 2 kg, lo que encarece el proceso de inspección (entre 18 y 25 dólares por paquete, frente a 3–5 para contenedores). Esto multiplica los puntos de entrada y exige capacidades adaptativas para su detección.
Los mercados digitales opacos agravan el panorama. Según la OCDE, el 68% de las falsificaciones se venden a través de plataformas de terceros, pero solo el 12% de estos marketplaces implementa verificaciones sistemáticas de autenticidad. Esto abre una brecha que facilita la circulación de productos ilícitos, sin control directo por parte de las autoridades o de los titulares de derechos.
Sin embargo, las soluciones emergen con fuerza. El sistema TITAN de la OMA utiliza IA predictiva para analizar 142 variables por envío, logrando una precisión del 94% en la identificación de productos falsificados. En América Latina, el proyecto CADENA está probando el uso de blockchain aduanero, ofreciendo trazabilidad completa desde el origen hasta el destino, y reduciendo las falsificaciones en un 41% en sus pilotos.
Las unidades móviles FAST, equipadas con laboratorios portátiles y espectrómetros Raman, permiten verificar productos en menos de 15 minutos. Estas soluciones innovadoras consolidan un control ágil y eficaz, capaz de actuar en un entorno de comercio digital dinámico y en expansión.
La lucha contra las falsificaciones ya no puede abordarse de forma fragmentada. Requiere una visión ecosistémica que articule tecnología avanzada, cooperación institucional, marcos legales dinámicos y formación continua. Solo así es posible construir barreras inteligentes capaces de filtrar productos ilícitos sin frenar el comercio legítimo.
Los países que han adoptado enfoques integrales —como Singapur o Suiza— han logrado reducir la circulación de productos falsificados hasta en un 60% en menos de cinco años. Estas experiencias demuestran que el enforcement efectivo no solo protege la propiedad intelectual, sino que resguarda la salud pública, la confianza del consumidor y la competitividad empresarial.
Mirando hacia el futuro, se hace indispensable avanzar hacia una armonización global de estándares, una adopción acelerada de tecnologías disruptivas y una mayor fiscalización de los entornos digitales. Solo así se podrá transformar a las fronteras, físicas y virtuales, en verdaderos filtros inteligentes que resguarden la economía legítima y los derechos de los consumidores.
OCDE & EUIPO. (2023). Trends in Trade in Counterfeit and Pirated Goods. OECD Publishing.
EUIPO. (2023). Annual Report on the Enforcement of Intellectual Property Rights.
WCO (World Customs Organization). (2023). IPM Annual Impact Report.
European Commission. (2023). Report on EU customs enforcement of intellectual property rights: Results at the EU border – 2022.
US Customs and Border Protection (CBP). (2023). Intellectual Property Rights Seizure Statistics – Fiscal Year 2022.
INTERPOL. (2023). IP Crime and Illicit Goods – Global Strategy 2023–2026.
EMVO (European Medicines Verification Organisation). (2023). Annual Performance Report.
EUIPO Observatory. (2023). Status Report on IPR Infringement.
LVMH. (2023). AURA Blockchain Consortium – Securing Authenticity.
CADENA Project (CAF – Banco de Desarrollo de América Latina). (2023). Blockchain Aduanero en América Latina: Resultados y Perspectivas.
WCO Academy. (2023). RILO Customs Enforcement Training Programs.
EUIPO. (2023). IPM Connect Platform.
El sistema de patentes, concebido como un incentivo para fomentar la innovación tecnológica y científica, enfrenta hoy un entorno cada vez más complejo. En teoría, las patentes buscan premiar la creatividad otorgando exclusividad temporal a quienes logran avances significativos. Sin embargo, en la práctica, este sistema se encuentra en constante tensión entre la protección de los derechos del inventor y el interés público por el acceso a productos esenciales, la libre competencia y la evolución tecnológica. En este escenario, las patentes no solo son un instrumento legal, sino también una poderosa herramienta estratégica.
Actualmente, distintos sectores industriales —desde el farmacéutico hasta el automotriz y el tecnológico— hacen uso intensivo del régimen de propiedad intelectual para posicionarse en el mercado, prolongar sus ventajas competitivas y anticiparse a nuevos desarrollos. Casos recientes como la demanda desestimada contra Bristol Myers Squibb por supuestas prácticas anticompetitivas, el registro de patentes para una motocicleta eléctrica por parte de BMW y TVS, y el ascenso de China como potencia global en patentes de inteligencia artificial, evidencian que las disputas en torno a la innovación han trascendido lo técnico para instalarse en el terreno económico, geopolítico y legal.
Este artículo analiza estos tres casos clave desde la perspectiva del sistema de patentes, destacando no solo los aspectos técnicos de cada uno, sino también sus implicaciones en materia de competencia, acceso, regulación y liderazgo tecnológico. A través de esta mirada, se busca comprender cómo las decisiones en torno a la propiedad intelectual están moldeando el presente y el futuro de industrias críticas, y cómo estos escenarios plantean desafíos importantes para países en desarrollo que buscan participar activamente en la economía del conocimiento.
El reciente fallo del Tribunal del Distrito Sur de Nueva York a favor de Bristol Myers Squibb (BMS) desestimó la demanda colectiva que acusaba a la empresa de mantener un monopolio sobre el medicamento Pomalyst. El caso puso en evidencia uno de los usos más polémicos del sistema de patentes: el evergreening o alargamiento artificial de exclusividades mediante la acumulación de patentes menores. Entre 2017 y 2020, BMS (y su subsidiaria Celgene) obtuvo múltiples patentes adicionales y presentó litigios contra fabricantes de genéricos como Teva y Mylan, lo que, según los demandantes, retrasó injustamente la entrada de versiones más económicas al mercado.
Sin embargo, el juez determinó que no existía evidencia suficiente de fraude ni de que las demandas fueran infundadas. Desde una perspectiva jurídica, este fallo reitera la importancia de probar objetivamente la mala fe en la adquisición y aplicación de patentes. No basta con mostrar la acumulación de patentes o el número de demandas: se requiere probar su carácter abusivo o fraudulento.
Este precedente plantea un debate crucial: ¿en qué momento la protección legítima de la innovación se convierte en una barrera artificial al acceso a medicamentos? Pomalyst generó más de 3.500 millones de dólares en ingresos en 2024, y el caso demuestra cómo las estrategias de propiedad intelectual pueden tener un profundo impacto en los costos para sistemas de salud y consumidores.
La controversia no es aislada. Casos similares, como los litigios contra AbbVie por Humira en EE. UU. o las investigaciones por abuso de posición dominante en Europa, muestran que el sistema de patentes puede ser instrumentalizado para fines anticompetitivos. En América Latina, donde los genéricos son clave para el acceso, estas dinámicas deben ser monitoreadas cuidadosamente. Para saber más lee: La empresa BMS logra desestimar la demanda colectiva que alega monopolio de Pomalyst.
En otro frente del sistema de patentes, BMW y su socio indio TVS Motor han registrado nuevas patentes para lo que sería la primera motocicleta eléctrica enchufable de la marca alemana. Este paso revela cómo el uso estratégico de las patentes no solo protege innovaciones técnicas, sino que también anticipa el posicionamiento en nuevos mercados y modelos de negocio.
Los registros detallan un diseño que rompe con la lógica de los scooters eléctricos tradicionales, al reubicar las baterías a ambos lados del chasis y ofrecer configuraciones intercambiables, lo que podría facilitar la diversificación de modelos en distintas gamas y países. Además, el uso de transmisiones por correa y motores comparables al King EV Max apunta a una plataforma modular que podría ser escalable y adaptable a regulaciones locales.
Este enfoque modular y patentado abre un abanico de posibilidades: desde motocicletas económicas aptas para el carnet A1 en Europa hasta modelos premium en América y Asia. Las patentes aseguran a BMW no solo exclusividad en los mercados donde se lancen primero estos modelos, sino también una herramienta legal frente a posibles imitaciones o desarrollos paralelos en una industria altamente competitiva.
La estrategia también refleja la relevancia de las alianzas globales: mientras BMW aporta diseño y reputación, TVS proporciona capacidad de manufactura y conocimiento del mercado emergente. Este tipo de colaboraciones demuestra cómo las patentes no son solo un instrumento de protección, sino una pieza clave en la arquitectura de innovación abierta y cooperación industrial. Puedes conocer más en: La moto eléctrica de BMW será realidad en 2025.
El AI Index 2025, elaborado por la Universidad de Stanford, reveló una transformación significativa en el liderazgo global en inteligencia artificial. Aunque EE. UU. continúa dominando en lanzamientos de modelos, China ha recortado la distancia con 15 desarrollos en 2024, y lidera en la cantidad de publicaciones científicas y solicitudes de patentes de IA. Este dato no es menor: las patentes son un indicador clave del nivel de sofisticación tecnológica de un país.
La propiedad intelectual se convierte aquí en una herramienta de política industrial. Desde 2015, China ha invertido en educación, infraestructura y propiedad intelectual en IA, consolidando una estrategia nacional que busca liderazgo tecnológico. Este crecimiento se refleja en modelos como DeepSeek, que ha logrado competir en descargas con plataformas como ChatGPT.
El uso intensivo del sistema de patentes también evidencia una diferencia de enfoque: mientras Silicon Valley tiende a priorizar el código abierto, China apuesta por una mayor protección patentaria en sus modelos, lo que puede generar tensiones con los principios de interoperabilidad y acceso a tecnologías emergentes.
Este escenario plantea un reto para América Latina: el bajo número de solicitudes de patentes relacionadas con IA en la región indica que aún estamos lejos de participar activamente en esta nueva ola tecnológica. Sin políticas públicas que fomenten la investigación, el registro de patentes y la colaboración universidad-empresa, el riesgo es pasar de consumidores a simples espectadores en la carrera global de la IA. Si quieres saber más, lee: China muestra crecimiento en la calidad de desarrollos de IA.
Los tres casos presentados reflejan la complejidad del ecosistema de patentes en la actualidad. Lejos de ser un mero mecanismo de protección, las patentes son utilizadas como herramientas estratégicas para dominar mercados, defender posiciones competitivas y configurar alianzas industriales globales. Ya sea en la industria farmacéutica, automotriz o tecnológica, el sistema de propiedad intelectual está en el centro de los principales debates sobre innovación, acceso y poder de mercado.
Desde una perspectiva jurídica y técnica, resulta esencial revisar los límites del sistema: evitar su abuso sin desincentivar la innovación. Asimismo, es clave fortalecer capacidades locales para participar activamente en este juego global. Para América Latina, este desafío implica una combinación de reformas legales, inversión en ciencia y tecnología, y desarrollo de capacidades institucionales en propiedad intelectual.
Las patentes no solo protegen inventos: definen quién tiene la capacidad de innovar, producir, y, en última instancia, transformar el mundo.
En un mundo donde la falsificación y la piratería continúan en aumento, la protección de la propiedad intelectual (PI) se vuelve crucial para garantizar la legalidad en el comercio y salvaguardar los derechos de marcas y creadores. La falta de capacitación especializada para las autoridades encargadas de la aplicación de la ley dificulta la detección y control de productos ilegales, debilitando los esfuerzos contra la falsificación.
La tercera edición del Taller de Propiedad Intelectual, organizada por Luzuriaga & Castro Abogados en colaboración con la Aduana de Ecuador, reforzó el conocimiento de los funcionarios aduaneros sobre la identificación de productos falsificados, la regulación vigente y las herramientas tecnológicas disponibles para fortalecer la protección de la PI.
Uno de los mayores desafíos en la lucha contra la falsificación es la identificación eficaz de productos ilegales. Muchas veces, los funcionarios aduaneros carecen de formación técnica para diferenciar entre productos originales y falsificados, lo que permite el ingreso de mercadería ilegal al mercado.
Capacitaciones como el Taller de Propiedad Intelectual no solo brindan herramientas prácticas para detectar falsificaciones, sino que también facilitan la cooperación con los titulares de derechos y otros actores clave. Esto permite mejorar los procedimientos de actuación y reforzar la aplicación de sanciones contra infractores.
En su tercera edición, el taller se enfocó en dotar a los funcionarios aduaneros de herramientas actualizadas para la detección de productos falsificados y la correcta aplicación de la normativa vigente. Entre los principales temas abordados estuvieron:
El evento proporcionó un espacio de aprendizaje y discusión, donde los participantes pudieron intercambiar experiencias y fortalecer su conocimiento en la aplicación de la ley en temas de PI.
Las capacitaciones en PI ofrecen ventajas clave para las autoridades y el sector empresarial:
Para mejorar la protección de la propiedad intelectual en Ecuador y la región, es necesario:
La capacitación en propiedad intelectual es fundamental para mejorar la protección de los derechos de PI y combatir la falsificación. La tercera edición del Taller de Propiedad Intelectual representó un paso adelante en la formación de funcionarios aduaneros, contribuyendo al fortalecimiento de la aplicación de la ley en Ecuador.
El trabajo conjunto entre autoridades, expertos y el sector privado es clave para garantizar un comercio legal y la protección efectiva de la propiedad intelectual en el país. La continuidad de estas iniciativas fortalecerá la capacidad de respuesta ante la falsificación y piratería, generando un impacto positivo en la economía y la seguridad del consumidor.
La protección de la propiedad intelectual (PI) es un componente esencial para fomentar la innovación y salvaguardar los intereses comerciales de creadores y empresas. Sin embargo, garantizar su efectividad requiere más que un marco legal: se necesita un sistema sólido de enforcement, o aplicación efectiva, capaz de enfrentar los desafíos regionales y proteger los derechos exclusivos de los titulares.
El enforcement implica un conjunto amplio de medidas para hacer cumplir las normas de propiedad intelectual, desde la prevención y el monitoreo hasta la persecución de las infracciones. En Latinoamérica, los delitos contra la PI van desde la falsificación de productos hasta la reproducción y distribución no autorizada de obras protegidas. Su impacto no solo se limita al ámbito económico, sino que también afecta la percepción de seguridad jurídica y limita la competitividad empresarial.
El carácter dual de los derechos de PI—con un componente tanto patrimonial como moral—subraya la importancia de abordarlos desde una perspectiva holística. Por un lado, se protege la capacidad creativa y el esfuerzo individual del autor o inventor, y por otro, se busca mantener un entorno competitivo y justo. La Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) ha destacado que una estrategia de enforcement eficaz requiere equilibrar las medidas punitivas con políticas de sensibilización y cooperación, sobre todo en mercados vulnerables a la informalidad.
El sistema penal es una pieza clave en la protección de la PI, ya que establece las bases para sancionar conductas que atentan contra la exclusividad de uso de marcas, patentes y otras creaciones protegidas. No obstante, la aplicación efectiva de las sanciones depende de varios factores, como la claridad de los marcos legales y la coherencia en su ejecución.
Los delitos contra la PI son considerados de peligro abstracto, es decir, no es necesario que se demuestre un daño concreto para que se considere infringido el bien jurídico protegido. Esta característica refuerza el principio de prevención, ya que busca inhibir comportamientos infractores antes de que se materialicen daños mayores.
En este contexto, es fundamental entender la diferencia entre los bienes protegidos. Mientras que los derechos de autor tienen un carácter personalista que prioriza la paternidad de la obra, los derechos industriales, como las marcas y patentes, están más ligados al aspecto económico de la competencia. Por ello, las sanciones penales deben considerar estas particularidades para ser verdaderamente efectivas.
La falsificación de productos y las imitaciones ilegales aprovechan la demanda generada por promociones exclusivas de empresas legítimas. Este fenómeno, común en fechas comerciales clave, revela una estrategia deliberada por parte de redes criminales para atraer consumidores con ofertas fraudulentas que simulan campañas originales, generando un ciclo continuo de confusión en el mercado.
Además de los daños económicos, estas prácticas afectan la reputación de las marcas y erosionan la confianza de los consumidores, quienes pueden verse involucrados en situaciones de riesgo al adquirir productos defectuosos o inseguros. Esta dinámica, potenciada por el auge del comercio electrónico y la proliferación de plataformas digitales, facilita la expansión de la piratería más allá de los mercados físicos, incrementando la complejidad del problema.
Por tanto, para hablar de acciones de enforcement eficaces, se debe contemplar acciones conjuntas entre autoridades, empresas y organismos internacionales para identificar patrones de fraude y actuar antes de que estos alcancen un impacto masivo. Esto incluye desde la implementación de sistemas de monitoreo avanzado hasta campañas de educación dirigidas al público para fomentar un consumo informado y consciente.
La regulación responsiva plantea la necesidad de adaptar las medidas según la gravedad de la infracción y el comportamiento del infractor. Este modelo, representado a través de una “pirámide de cumplimiento”, sugiere iniciar con medidas preventivas, como cartas de advertencia, reuniones informativas y capacitaciones para sensibilizar a los agentes económicos. Estas acciones no solo buscan informar, sino generar un cambio en la percepción sobre los derechos de propiedad intelectual y promover el cumplimiento voluntario.
Sin embargo, cuando estas medidas iniciales no surten efecto, se procede a intensificar las acciones mediante auditorías más frecuentes, inspecciones y la emisión de sanciones progresivas. En el ámbito penal, estas medidas deben considerar tanto los efectos directos de la infracción como su impacto en la confianza del mercado y en la cadena de valor de la innovación. Un caso ejemplar es la sanción a redes de falsificación, que además de castigar el delito, envía un mensaje disuasorio a posibles infractores, fortaleciendo el entorno de legalidad.
Finalmente, estas medidas deben complementarse con campañas de sensibilización dirigidas al público y a las empresas para evitar que, incluso sin intención, los consumidores contribuyan al ciclo de piratería. Este enfoque tiene como objetivo establecer una red de protección que aborde tanto la prevención como la corrección de las conductas, garantizando un equilibrio entre sanción y educación para fortalecer la cultura de respeto a la propiedad intelectual.
La diversidad de realidades económicas y culturales en la región plantea desafíos significativos para el enforcement. La persistencia de mercados informales, la alta demanda de productos de bajo costo y la limitada percepción sobre los derechos de los autores y titulares dificultan la tarea de erradicar la piratería.
Además, los vacíos legales o la falta de armonización de las normativas regionales pueden generar inconsistencias que los infractores aprovechan para operar en zonas grises. La armonización de criterios y el fortalecimiento de los mecanismos de intercambio de información son pasos clave para contrarrestar este problema.
Un sistema de protección de PI debe ir más allá de la simple imposición de sanciones. Es necesario promover una cultura de respeto hacia la creatividad y la innovación mediante políticas educativas, campañas de concienciación y el reconocimiento del valor de los derechos de autor y de la propiedad industrial.
La colaboración público-privada es también un factor decisivo. Las alianzas entre gobiernos, organismos internacionales y el sector privado permiten compartir experiencias, optimizar recursos y diseñar estrategias más eficaces para combatir la piratería y la falsificación. Asimismo, es fundamental fomentar el uso de herramientas tecnológicas avanzadas, como sistemas de trazabilidad y monitoreo digital, para identificar patrones de conducta y anticipar amenazas.
La protección de la propiedad intelectual en Latinoamérica requiere un enfoque multidimensional que combine prevención, sanción y sensibilización. El enforcement efectivo debe garantizar tanto la defensa de los derechos individuales de los creadores como la integridad del mercado y la seguridad de los consumidores. Solo a través de una estrategia coordinada, flexible y sostenible se podrá consolidar un entorno donde la innovación prospere y los derechos de los titulares sean plenamente respetados.
Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI).
Bajo Fernández, M. (1989). Manual de Derecho Penal: Parte Especial. Editorial Centro de Estudios Ramón Areces.
Esteve Sáez de Retana, B. (2021). La protección penal de la propiedad industrial: especial referencia a patentes y marcas. Universidad Autónoma de Madrid.
Cobo del Rosal, M. y Otros. (1988). Derecho Penal: Parte Especial. Tirant Lo Blanch.
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En la era digital, la innovación tecnológica avanza a un ritmo vertiginoso. Empresas de distintos sectores compiten por desarrollar soluciones innovadoras que transformen la vida cotidiana de las personas. En este contexto, las patentes se han convertido en un elemento clave para la protección de inventos y el fortalecimiento de estrategias de negocio.
El sistema de patentes no solo ofrece incentivos para la investigación y el desarrollo (I+D), sino que también actúa como un mecanismo de regulación del mercado. Al otorgar derechos exclusivos sobre una invención, permite a las empresas recuperar su inversión en innovación, garantizando que puedan aprovechar comercialmente sus desarrollos sin temor a la copia inmediata por parte de la competencia.
Sin embargo, el uso de patentes también plantea interrogantes críticas: ¿hasta qué punto incentivan la innovación o, por el contrario, la frenan al restringir el acceso a ciertas tecnologías? ¿Cómo afectan las patentes al equilibrio entre protección y acceso en sectores de rápida evolución como la inteligencia artificial, la robótica y la automoción? Para entender mejor estos dilemas, analizaremos casos recientes de grandes empresas que han utilizado las patentes de manera estratégica. No te olvides de revisar casos anteriores Innovación y Protección: Patentes en el Centro de la Era Tecnológica.
El gigante tecnológico Google ha presentado una patente que podría marcar un antes y un después en la automatización del hogar. Se trata de un "dispositivo doméstico robótico" que, a diferencia de los asistentes virtuales actuales, no solo responde a comandos de voz, sino que también se desplaza de forma autónoma y realiza tareas físicas en el hogar.
Esta patente sugiere una convergencia entre inteligencia artificial, movilidad autónoma y la gestión de dispositivos IoT (Internet de las Cosas). Si bien ya existen robots especializados en tareas como aspirar o vigilar el hogar, Google propone un enfoque más integral: un asistente robótico que interactúe activamente con los usuarios y colabore con otros dispositivos inteligentes.
Desde un punto de vista legal, la estrategia de Google se alinea con su trayectoria en la protección de innovaciones disruptivas. Sin embargo, también enfrenta retos regulatorios, en especial en lo que respecta a la privacidad de los usuarios y la recopilación de datos personales. La implementación de esta tecnología podría generar litigios por el uso indebido de información personal, un problema recurrente en dispositivos con capacidades de monitoreo. Si quieres saber más, puedes leer: Una patente industrial adelanta posible entrada de Google en mercado de robots doméstico.
La industria automotriz también está en constante evolución, y Ford ha dado un paso importante en la digitalización de la experiencia de conducción con su patente "In vehicle voice feedback". Este sistema permite a los conductores registrar sus opiniones y sugerencias sobre el funcionamiento del vehículo en tiempo real. Las observaciones se guardan en la nube y se analizan mediante algoritmos para mejorar futuras versiones de los automóviles.
Tradicionalmente, los fabricantes de autos han recopilado información del usuario mediante encuestas postventa o revisiones en concesionarios. Ford propone un modelo más inmediato y efectivo, donde la interacción del usuario con el vehículo se convierte en un flujo constante de información valiosa.
El impacto de esta patente va más allá de la simple recolección de datos. En un mercado donde la experiencia del usuario define la competitividad, la capacidad de adaptar el diseño de los automóviles en función del feedback en tiempo real podría representar una ventaja estratégica para Ford. No obstante, también plantea desafíos legales, en particular en lo que respecta a la protección de la privacidad del usuario y el uso de datos sensibles. Si buscas más información, puedes leer: La patente de Ford con la que podrás quejarte todo lo que quieras sobre el coche a los ingenieros.
Desde su introducción en 2007, el iPhone ha sido un referente en innovación tecnológica. Apple ha registrado recientemente una patente que podría acercarnos al "iPhone perfecto": un dispositivo sin notch ni Dynamic Island, en el que los sensores de Face ID y la cámara frontal estarían ocultos debajo de la pantalla.
El objetivo de esta patente es eliminar cualquier interrupción visual en la pantalla, mejorando la experiencia del usuario. Sin embargo, la tecnología necesaria para hacer esto viable presenta desafíos técnicos significativos, como la capacidad de los sensores para captar luz suficiente sin afectar la calidad de la imagen.
Desde el punto de vista legal, Apple ha sido históricamente muy agresiva en la protección de sus diseños y tecnologías. Su estrategia de patentes busca blindar sus innovaciones para evitar que la competencia adopte características similares sin su consentimiento. Esto podría generar nuevas disputas con otros fabricantes que buscan desarrollar tecnologías similares. Para saber más puedes leer: La nueva patente de Apple nos hace sonreír. El iPhone perfecto se acerca.
El sistema de patentes sigue siendo una pieza fundamental en la protección de la innovación y la generación de ventajas competitivas. Como hemos visto en los casos de Google, Ford y Apple, las patentes no solo aseguran el control sobre una invención, sino que también pueden definir la dirección estratégica de una empresa y su posición en el mercado.
Sin embargo, las patentes también plantean desafíos. La competencia entre empresas puede derivar en disputas legales prolongadas, y el acceso restringido a ciertas tecnologías podría limitar la innovación abierta. Además, las implicaciones legales en materia de privacidad, monopolios y regulaciones internacionales requieren una gestión cuidadosa por parte de los desarrolladores y abogados especializados.
A medida que la tecnología avanza, es crucial encontrar un equilibrio entre la protección de la propiedad intelectual y la necesidad de fomentar un ecosistema innovador y accesible. En este escenario dinámico, la evolución del marco legal y la estrategia de patentes seguirán siendo temas centrales en el futuro de la tecnología y la innovación.
La reciente sentencia condenatoria por asociación ilícita en un caso de propiedad intelectual en Ecuador marca un paso trascendental en la protección de los derechos de marcas internacionales frente a la comercialización de productos falsificados. Este fallo no solo representa un precedente legal en Ecuador, sino que también refleja un esfuerzo consolidado entre el sector privado y las instituciones públicas para desarticular redes de falsificación y fortalecer el sistema de justicia. La resolución judicial emite un mensaje inequívoco: quienes vulneren los derechos marcarios se enfrentarán a consecuencias legales proporcionales a la magnitud de sus acciones.
El proceso penal, tramitado en la jurisdicción de Loja, tuvo su origen en denuncias interpuestas por diversas marcas internacionales afectadas por la venta de productos falsificados. La Fiscalía, en coordinación con los representantes legales, documentó el funcionamiento de una red con roles bien definidos, evidenciando que se trataba de un esquema organizado y no de hechos aislados. Este caso pone de manifiesto la complejidad de las operaciones ilegales que buscan debilitar la estructura del mercado legítimo.
El caso se distinguió por la precisión de las investigaciones y el manejo estratégico de los recursos probatorios (elementos de convicción). La colaboración entre diversas entidades permitió no solo identificar a los responsables directos, sino también revelar los mecanismos mediante los cuales la red distribuía productos falsificados en puntos estratégicos de la región.
Investigación y Recopilación de Pruebas
Desde las primeras denuncias, se estableció un plan de trabajo que priorizó la recolección de pruebas que demostraran el alcance y modus operandi de la red delictiva. La reconstrucción de las actividades de los implicados incluyó el análisis de transacciones sospechosas, inventarios irregulares y declaraciones de testigos protegidos.
Las evidencias más destacadas apuntaban a registros documentales que reflejaban movimientos sospechosos en inventarios y facturas inconsistentes, así como información clave obtenida a partir del monitoreo de comunicaciones y el análisis de los dispositivos incautados durante el operativo. También se consideraron informes técnicos sobre la autenticidad de la mercancía, que ilustraban con precisión los indicios de falsificación. Este cúmulo de elementos permitió comprender la magnitud y complejidad de la red sin entrar en detalles técnicos innecesarios sobre el procedimiento investigativo, poniendo el énfasis en el impacto de estas acciones y sus implicaciones legales.
Los procesados se acogieron al procedimiento abreviado, una herramienta contemplada en el COIP que permite acelerar el proceso judicial mediante la aceptación de responsabilidad y, con ello, obtener una reducción de la pena. La colaboración entre nuestro equipo legal y la Fiscalía fue un esfuerzo unificado que garantizó la integración legítima y consistente de las pruebas al proceso. Este enfoque permitió identificar con claridad a los responsables operativos y evidenció cómo las decisiones de los líderes reforzaban el funcionamiento de la estructura criminal, sin entrar en detalles técnicos innecesarios sobre el procedimiento investigativo.
Evaluación y Preparatoria de Juicio
Durante el desarrollo de esta etapa penal, se presentaron las pruebas, mostrando cómo cada elemento aportaba a la reconstrucción de este sistema criminal. Las audiencias preprocesales fueron clave para evidenciar la existencia de una organización con una jerarquía clara y un plan de acción definido.
En las audiencias se destacaron elementos fundamentales que contribuyeron a fortalecer la presentación de la acusación. Entre ellos, los informes de peritos en propiedad intelectual que explicaron la relevancia de los indicadores de autenticidad y cómo estos evidenciaron la falsificación de los productos y documentos financieros que evidenciaron transacciones irregulares y cuentas asociadas a los responsables, reafirmando la existencia de ganancias ilícitas derivadas de la comercialización de productos falsificados.
Este conjunto de elementos reforzó la narrativa del caso y puso de relieve la complejidad de la operación investigada. La argumentación durante las audiencias logró reforzar la idea de que la operación no solo buscaba lucrar a través de la falsificación, sino que empleaba estrategias para evitar controles legales y perpetuar sus actividades de manera discreta.
Sentencia y Precedentes
La sentencia emitida ratificó la culpabilidad de los procesados y subrayó la importancia de incluir la figura de asociación ilícita en este tipo de casos. Esta figura legal permitió abordar el delito desde una perspectiva más amplia, evidenciando que los actos de falsificación no eran eventos aislados, sino parte de una trama estructurada que requería una planificación conjunta y roles específicos.
La relevancia de la figura de asociación ilícita radica en su capacidad para sancionar de manera integral la colaboración entre múltiples individuos que participan en la comisión de infracciones. Esta sentencia refuerza el criterio de que la respuesta jurídica debe estar a la altura de la sofisticación de las redes criminales. En nuestro próximo análisis, exploraremos a profundidad los alcances de esta figura y cómo fortalece la defensa de la propiedad intelectual en casos de alta complejidad.
Este fallo representa un antes y un después en la protección de los derechos marcarios en Ecuador y contribuye a afianzar la confianza en el sistema de justicia. Más allá de la resolución específica, la sentencia establece un precedente que influirá en la manera en que se aborden futuros procesos relacionados con la falsificación y la piratería.
Implicaciones Clave:
Este resultado refleja el éxito de un esfuerzo colectivo en el que cada actor cumplió un rol crucial: desde la Fiscalía hasta nuestro equipo de abogados y peritos, todos contribuyeron a la construcción de un caso robusto que desmanteló un esquema delictivo y sentó las bases para procedimientos futuros.
El fallo subraya la necesidad de mantener y fortalecer la colaboración entre las partes involucradas. La experiencia derivada de este caso demuestra que la defensa de la propiedad intelectual no debe limitarse a la reacción ante los delitos, sino que debe incorporar estrategias preventivas, educativas y sancionadoras.
Como representantes legales de las marcas afectadas, reafirmamos nuestro compromiso de seguir implementando medidas de protección y promover buenas prácticas comerciales. La lucha contra la falsificación demanda un análisis constante de los riesgos y una actualización de los procedimientos legales que responda a las nuevas dinámicas del mercado.
Además, la colaboración con organismos internacionales será esencial para combatir redes con vínculos transnacionales. Fortalecer alianzas globales permitirá compartir recursos y experiencias, mejorando la capacidad de respuesta ante operaciones complejas.
Este caso reafirma que, con planificación estratégica y cooperación efectiva, es posible cerrar los márgenes de acción de quienes buscan desestabilizar el comercio legal. La protección de la propiedad intelectual es un componente clave para fomentar la innovación, la lealtad de los consumidores y la competitividad justa.
En el mundo actual, la propiedad intelectual sigue siendo un pilar fundamental para fomentar la innovación y proteger los avances tecnológicos en múltiples sectores. Las patentes no solo resguardan la creatividad y la inversión, sino que también generan oportunidades de expansión comercial y competitividad global. Este tipo de protección otorga a las empresas la seguridad jurídica necesaria para capitalizar sus innovaciones y fortalecer su liderazgo en el mercado.
A medida que nuevas tecnologías emergen, la protección de estas invenciones se convierte en un recurso estratégico indispensable. Desde las comunicaciones y la salud hasta la industria automotriz, cada avance refuerza la importancia de contar con un ecosistema sólido de propiedad intelectual. Las empresas deben mantenerse vigilantes y adaptarse a los cambios normativos para prevenir vulnerabilidades y aprovechar las oportunidades que ofrecen las patentes.
Durante el inicio de 2025, han surgido hitos importantes en el ámbito de las patentes que evidencian la relevancia de una estrategia efectiva en este campo. Los casos más recientes reflejan la constante evolución de las industrias tecnológicas y biofarmacéuticas, destacando el papel de las patentes en la consolidación de nuevos liderazgos y en la protección de innovaciones clave.Si quieres saber sobre casos del anterior año, revisa: Patentes SEP, Tecnología y Salud: Desafíos en la Propiedad Intelectual.
Nokia ha alcanzado un importante hito al registrar más de 7.000 familias de patentes esenciales para el estándar 5G, un avance que reafirma su posición como líder en tecnologías de red de próxima generación. Estas patentes cubren aspectos fundamentales como protocolos de radio, seguridad de redes y tecnologías de interfaz, permitiendo una interacción eficiente entre dispositivos IoT, automóviles conectados y smartphones. Este logro no solo fortalece la posición de Nokia en el presente, sino que también le otorga un punto de partida sólido para el desarrollo del 6G.
Desde el año 2000, Nokia ha invertido más de 150.000 millones de euros en investigación y desarrollo (I+D), construyendo una cartera robusta con más de 20.000 familias de patentes. Esta inversión estratégica ha permitido que la compañía sea una referencia en estandarización y desarrollo de redes, anticipando las necesidades del mercado y liderando los avances hacia el futuro de las telecomunicaciones. La visión a largo plazo de la compañía ha sido clave para mantenerse competitiva en un sector dinámico y en constante transformación.
La adopción de un modelo de licenciamiento basado en términos justos, razonables y no discriminatorios (FRAND) ha sido otro elemento distintivo de la estrategia de Nokia. Este enfoque permite que otras empresas accedan a sus tecnologías avanzadas sin necesidad de realizar grandes inversiones iniciales en estandarización, fomentando la interoperabilidad y la innovación conjunta en el ecosistema 5G. Esta política de licencias ha posicionado a Nokia como un actor clave para el avance global de las redes de próxima generación. Para saber más del tema puedes ver: Nokia supera las 7.000 familias de patentes esenciales para 5G.
Otra empresa que ha marcado el inicio de 2025 con un avance significativo es Silo Pharma, Inc., tras recibir un Aviso de Concesión de la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos (USPTO) para su patente relacionada con el tratamiento SPC-15, diseñado para abordar el trastorno de estrés postraumático (TEPT). Este avance amplía las reivindicaciones de una patente previa emitida en 2023, reforzando la protección de su principal activo y asegurando un marco sólido para la expansión de su propiedad intelectual.
La importancia de esta concesión radica en su capacidad para fortalecer la posición de Silo en el mercado biofarmacéutico, un sector donde la propiedad intelectual es clave para asegurar competitividad y atraer inversores. La aprobación de la patente representa un respaldo a los años de investigación y desarrollo, validando el potencial de SPC-15 como tratamiento innovador y exclusivo. Este proceso ha generado un alto nivel de confianza en los inversores, quienes ahora perciben la solidez de su estrategia de propiedad intelectual. Para saber más de este tema puedes leer: Las acciones de Silo Pharma se disparan ante la noticia de concesión de patente.
El acuerdo de licencia exclusiva con la Universidad de Columbia ha sido un pilar esencial para Silo Pharma, permitiéndole expandir su portafolio de patentes mediante la colaboración con una de las instituciones más prestigiosas en el ámbito de la investigación médica. Este acuerdo respalda la producción y comercialización del SPC-15 a nivel global y fortalece el desarrollo de otros activos en fase de investigación. Gracias a esta asociación, la compañía refuerza su liderazgo en el campo de tratamientos especializados para condiciones de salud mental, consolidando su relevancia en un sector altamente competitivo y en constante cambio.
El sector de los vehículos eléctricos también ha iniciado el año con novedades. La primera patente filtrada de 2025 pertenece a Rivian y presenta un sistema de faros calefactables diseñado para evitar la acumulación de hielo y nieve en regiones de climas extremos. Esta tecnología se basa en nanotubos de carbono con alta conductividad térmica, lo que permite mantener operativa la iluminación en condiciones adversas y mejora la seguridad en carretera para los usuarios.
El sistema de iluminación de Rivian no solo resuelve un problema recurrente en condiciones invernales, sino que también refleja su compromiso con la seguridad y la experiencia del usuario. Este desarrollo demuestra la capacidad de la compañía para diseñar soluciones que responden a las necesidades de los conductores en escenarios complejos, destacándose en un mercado donde los avances tecnológicos son decisivos para la experiencia del cliente.
Sin embargo, la filtración de esta patente pone en evidencia una problemática latente: la vulnerabilidad de los registros de propiedad intelectual. Las oficinas de patentes, en particular la estadounidense, han sido objeto de críticas por sus brechas de seguridad que facilitan la divulgación no autorizada de información sensible. Este incidente subraya la necesidad de fortalecer las medidas de protección y garantizar que las innovaciones estratégicas de las empresas permanezcan resguardadas durante el proceso de registro, evitando así que terceros puedan acceder a información clave antes de la aprobación oficial.
La implementación de protocolos más estrictos y la modernización de las plataformas digitales de registro son algunas de las medidas urgentes que podrían contribuir a evitar este tipo de situaciones. De lo contrario, los casos de filtraciones podrían aumentar, afectando no solo la competitividad de las empresas, sino también la confianza en el sistema de patentes a nivel global. Revisa más en: La primera patente filtrada de 2025 es de Rivian y promete iluminar las carreteras sin límites.
Las actualizaciones en materia de patentes durante el inicio de 2025 ponen de manifiesto la importancia de contar con una estrategia sólida de propiedad intelectual que respalde los esfuerzos de innovación y expansión de mercado. Empresas como Nokia, Silo Pharma y Rivian demuestran que las patentes no solo protegen los avances tecnológicos, sino que también desempeñan un papel crucial en la atracción de inversores y en la consolidación de liderazgos en industrias altamente competitivas.
El uso de modelos de licenciamiento abiertos, como el FRAND implementado por Nokia, evidencia cómo un enfoque colaborativo puede acelerar la adopción de tecnologías clave. Al mismo tiempo, los desafíos de seguridad en los registros de patentes, como el caso de Rivian, recuerdan la importancia de un marco regulatorio que priorice la protección de la información sensible y la confianza en el sistema. La credibilidad y la solidez de las instituciones encargadas de registrar y proteger las innovaciones son esenciales para garantizar un entorno de competencia justa y segura.
El 2025 se perfila como un año clave para la evolución del marco global de propiedad intelectual, con nuevos retos y oportunidades para los actores de diversos sectores. Estar atentos a estos cambios permitirá a los abogados especializados en propiedad intelectual asesorar de manera precisa y estratégica a sus clientes en un entorno cada vez más dinámico y complejo.
Las festividades de diciembre traen consigo una explosión de consumo en Latinoamérica, y Ecuador no es la excepción. Este aumento en las compras también es aprovechado por redes de falsificación y piratería, que inundan el mercado con productos falsificados, afectando no solo a la economía, sino también a la seguridad y la salud de los consumidores. En este contexto, es crucial comprender los riesgos asociados y adoptar medidas para combatir esta problemática.
Ecuador, como parte de una región dinámica en términos comerciales, enfrenta un aumento significativo de la piratería durante las festividades navideñas. Los productos más afectados incluyen juguetes, electrónicos, ropa, cosméticos y artículos de temporada, como luces de Navidad. La facilidad de acceso a estos productos a través de mercados informales y plataformas digitales complica su control, aumentando la vulnerabilidad de los consumidores y perjudicando a las marcas legítimas.
Según el Servicio Nacional de Propiedad Intelectual (SENADI), el impacto económico de la piratería en Ecuador no solo afecta a las empresas, sino que también repercute en la recaudación fiscal, debido a la evasión de impuestos asociada a este comercio ilícito.
La compra de productos falsificados puede parecer una alternativa económica, pero a largo plazo genera pérdidas significativas. La piratería en Ecuador alcanza su punto álgido en diciembre debido al incremento en la demanda de productos relacionados con las festividades. Según datos de organismos locales, los productos falsificados más comunes incluyen luces navideñas, ropa y dispositivos electrónicos. Estos productos suelen comercializarse en mercados informales y a través de plataformas digitales, donde la regulación es más difícil de aplicar.
La alta penetración del comercio informal en el país agrava la situación, ya que muchas transacciones ocurren sin controles efectivos. El impacto económico es profundo. Empresas ecuatorianas, especialmente en sectores como el textil y la tecnología, enfrentan una competencia desleal que reduce sus ventas y margina a los negocios formales. Además, la evasión fiscal por parte de estas redes ilícitas priva al Estado de ingresos esenciales para programas sociales y de desarrollo.
El problema también afecta a las exportaciones, ya que la percepción de productos falsificados en el mercado local puede dañar la reputación de la industria nacional. Para los consumidores, el atractivo de un precio bajo puede resultar engañoso. Muchos no consideran que el costo a largo plazo de estos productos incluye no solo riesgos a su seguridad, sino también el fortalecimiento de redes criminales que prosperan a expensas de la economía formal. La falta de conocimiento sobre las consecuencias de la piratería perpetúa este ciclo dañino.
Uno de los mayores peligros de los productos falsificados es su calidad deficiente. En Ecuador, las luces navideñas y los cosméticos falsificados han sido objeto de alerta debido a los riesgos que representan. Por ejemplo, las luces de baja calidad pueden causar incendios, mientras que los cosméticos pueden contener sustancias tóxicas que afectan la salud de los usuarios.
A nivel global, las agencias encargadas de proteger los derechos de propiedad intelectual han advertido sobre el vínculo entre la piratería y el financiamiento de actividades delictivas. En Ecuador, la falta de control, que cada año es menor, pero que todavia existe, especificamente sobre el origen de estos productos permite que redes internacionales ingresen mercancías peligrosas, muchas veces fabricadas bajo condiciones de trabajo forzado o explotación laboral. Este fenómeno no solo impacta a los consumidores, sino que también perpetúa prácticas de abuso en la cadena de suministro.
Además de los riesgos de salud, las plataformas digitales se han convertido en un terreno fértil para la venta de artículos falsificados. Sitios web no regulados y algunas redes sociales exponen a los compradores a estafas, donde no solo pierden dinero, sino que también ven comprometida su información financiera. Estas actividades representan una amenaza creciente en un país donde el comercio digital está en plena expansión, pero aún carece de controles que podrian considerarse robustos.
Para mitigar el impacto de la piratería en Ecuador, es fundamental adoptar prácticas de consumo responsable. Algunas recomendaciones incluyen:
Combatir la piratería en Ecuador requiere un enfoque integral que combine la aplicación de leyes de propiedad intelectual con una fuerte campaña educativa. Actualmente, los esfuerzos para proteger las marcas y derechos de autor, en esta epoca en concreto, enfrentan desafíos significativos, desde la falta de recursos hasta la limitada colaboración entre sectores público y privado. Sin embargo, iniciativas como las campañas informativas pueden empoderar a los consumidores a tomar decisiones más conscientes.
Un punto clave es fortalecer la cooperación internacional, ya que gran parte de los productos falsificados que ingresan al país provienen de mercados globales. La implementación de acuerdos con otros países puede mejorar los controles en las fronteras y reducir el flujo de mercancías ilegales. Asimismo, se deben priorizar las inversiones en tecnología que permitan identificar y rastrear productos falsificados, especialmente en plataformas digitales.
Para los consumidores, adoptar hábitos de compra responsables es crucial. Comprar en establecimientos autorizados, verificar la autenticidad de los productos y denunciar actividades sospechosas son acciones que marcan la diferencia. En última instancia, la solución a la piratería no solo depende de las autoridades, sino también de un cambio cultural que valore el respeto por la propiedad intelectual como uno de los pilares del desarrollo económico y social.
La piratería en Ecuador durante diciembre no es solo un problema de consumo, sino un desafío estructural que afecta la economía, la seguridad y el bienestar de los ciudadanos. Las festividades navideñas representan una oportunidad para reflexionar sobre el impacto de nuestras decisiones de compra y actuar en consecuencia. Solo a través de un esfuerzo conjunto entre consumidores, empresas y autoridades será posible construir un mercado más seguro y justo. En este sentido, ¿qué papel jugará cada uno de nosotros esta Navidad?
Servicio Nacional de Derechos Intelectuales (SENADI). (2024). Estrategias para combatir la piratería en Ecuador durante las festividades.
Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI). (2023). Agencias federales advierten sobre compra de artículos falsificados antes de las fiestas navideñas.
Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). (2023). Riesgos asociados a productos falsificados en mercados de América Latina.
Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI). (2023). La piratería en festividades: Impactos globales y soluciones locales. Ginebra, Suiza: OMPI.
El Comercio. (2023). El crecimiento de la piratería digital y física en Ecuador durante la Navidad.